Preguntas Trampa del Tribunal Médico: Guía para Superarlo

Enfrentarse al Tribunal Médico, denominado oficialmente Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), es un momento decisivo que genera incertidumbre y ansiedad. No se trata de una mera consulta médica, sino de un procedimiento administrativo determinante para el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente o la continuidad de una baja laboral.

Muchos trabajadores temen las conocidas «preguntas trampa», diseñadas para obtener información que, mal gestionada, puede perjudicar sus intereses. En Juristas Laboralistas, como abogados expertos en incapacidad permanente, hemos elaborado esta guía definitiva. El objetivo no es enseñarle a ocultar la verdad, sino a exponerla con precisión, coherencia y la solidez que sus informes médicos merecen, garantizando que sus derechos sean defendidos con la máxima rigurosidad.

La verdadera función del Tribunal Médico: ¿A qué se enfrenta realmente?

Para afrontar la evaluación con seguridad, es fundamental comprender el rol de cada actor y la finalidad del proceso.

Misión del Inspector Médico del INSS

El inspector o médico evaluador del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) es el profesional sanitario encargado de entrevistarle y examinarle. Su misión principal es contrastar la información contenida en sus informes médicos con su estado de salud actual y su testimonio. Su objetivo es formarse una opinión técnica sobre cómo las patologías que padece limitan de forma efectiva su capacidad para trabajar.

El papel del Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI)

El inspector médico no toma la decisión final. Tras la evaluación, elabora una propuesta que eleva al Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI). Este es un órgano colegiado, compuesto por distintos profesionales, que analiza toda la documentación y la propuesta del inspector para emitir la resolución final: conceder o denegar la incapacidad permanente, o bien, dar el alta médica.

El Informe Médico de Síntesis

El Informe Médico de Síntesis es el documento que elabora el inspector médico tras su visita. En él se recogen sus antecedentes, la exploración realizada y, lo más importante, las limitaciones orgánicas y funcionales que el inspector considera acreditadas. Este informe es la columna vertebral de la decisión del EVI. Un contenido desfavorable o impreciso en este documento conduce, con altísima probabilidad, a la denegación de sus pretensiones.

Las 5 preguntas clave del Tribunal Médico

Debe comprender que estas preguntas no buscan «cazarle», sino detectar posibles incoherencias entre su relato, su lenguaje no verbal y la documentación médica aportada. La coherencia es su mejor aliada.

Pregunta 1: «¿Cómo se encuentra?» / «¿Cómo está?»

– Respuesta incorrecta: «Bien, gracias.» o respuestas automáticas y vagas.

– Interpretación del inspector: El trabajador no manifiesta limitaciones relevantes en su vida diaria. Si está «bien», puede trabajar.

– Enfoque estratégico: Sea específico y vincule siempre su estado a sus limitaciones funcionales para el trabajo. Ejemplo: «Pues la verdad, continúo con los dolores lumbares que me impiden permanecer sentado más de 20 minutos, tal y como indica el último informe del traumatólogo.»

Pregunta 2: «¿Ha mejorado desde que está de baja?»

– Respuesta incorrecta: «Sí, he mejorado mucho.»

– Interpretación del inspector: El tratamiento está siendo efectivo y se aproxima la recuperación funcional. Es, por tanto, un candidato al alta médica.

– Enfoque estratégico: Responda con honestidad en el contexto de su capacidad laboral. La mejoría puede existir, pero ser insuficiente para las demandas de su puesto. Ejemplo: «Aunque la medicación ha reducido la inflamación, las limitaciones principales para mi trabajo, como la pérdida de fuerza en la mano derecha, no han mostrado una mejoría que me permita volver a mis funciones.»

Pregunta 3: «¿Viene solo o acompañado?»

– Respuesta incorrecta (si se alegan patologías graves de movilidad o psíquicas): «He venido solo.»

– Interpretación del inspector: La patología (agorafobia, vértigos severos, artrosis invalidante, etc.) no es tan grave como para mermar la autonomía personal del individuo.

– Enfoque estratégico: La coherencia. Si su patología, debidamente documentada, le dificulta o impide desplazarse con seguridad, debe acudir acompañado y explicarlo con total naturalidad. «He venido con mi pareja, ya que los mareos me impiden conducir con seguridad.»

Pregunta 4: «¿Qué puesto de trabajo tiene?»

– Respuesta incorrecta: «Soy administrativo» o «Trabajo en una fábrica.»

– Interpretación del inspector: Una descripción genérica no permite analizar el nexo causal entre la dolencia y las tareas específicas del puesto.

– Enfoque estratégico: Proporcione la denominación exacta que figura en su contrato y su categoría profesional. Ejemplo: «Mi puesto es de Oficial de Primera de Fontanería» o «Soy Auxiliar Administrativa Contable, Grupo IV.»

Pregunta 5: «¿Qué tareas hacía en su trabajo?»

– Respuesta incorrecta: «Pues de todo un poco…» o una descripción superficial.

– Interpretación del inspector: El trabajador no tiene claras sus funciones o estas no implican requerimientos físicos o mentales exigentes.

– Enfoque estratégico: Describa con detalle las funciones que sus dolencias le impiden realizar, cuantificando siempre que sea posible. Ejemplo: «Mi trabajo como mozo de almacén especialista exigía la manipulación manual de cargas de hasta 25 kg de forma repetida, permanecer 8 horas de pie con escaso descanso y realizar torsiones de tronco constantes, esfuerzos que mi hernia discal L5-S1, según los informes, me impide realizar de forma segura.»

El lenguaje no verbal: Lo que su cuerpo le dice al inspector

La evaluación es integral. El inspector observa su comportamiento desde que entra en la consulta.

El error del «truco del abrigo»

Un ejemplo clásico: un trabajador alega una grave lesión de hombro (ej. rotura del manguito rotador) que le impide levantar el brazo. Sin embargo, al finalizar la consulta, se pone el abrigo con total normalidad, elevando ambos brazos sin dificultad. Acaba de contradecir todo su testimonio y la validez de sus informes.

Coherencia gestual durante toda la visita

Sea natural dentro de sus limitaciones reales. Si padece una ciática severa, no se agache a recoger algo del suelo con agilidad. Si tiene una artrosis de rodilla, su forma de caminar y sentarse debe reflejar esa dificultad. No se trata de exagerar, sino de no realizar acciones que médicamente serían incoherentes con su cuadro clínico.

La documentación: La base probatoria de su incapacidad

Sus palabras deben estar blindadas por una documentación médica sólida y bien orientada.

El peso de los informes médicos (públicos vs privados)

Los informes emitidos por el Sistema Público de Salud (traumatólogos, psiquiatras, reumatólogos de la Seguridad Social) gozan de una fuerte presunción de veracidad. No obstante, los informes de especialistas privados son perfectamente válidos y complementarios, sobre todo si acreditan un seguimiento prolongado y detallado de la patología.

Acreditar la cronicidad: El concepto de «agotamiento terapéutico»

No basta con tener una dolencia. Debe probarse que esta es crónica y que se ha llegado a una situación de agotamiento terapéutico. Esto significa demostrar que se han seguido todos los tratamientos pautados por los especialistas (farmacológicos, rehabilitadores, etc.) sin que se haya producido una mejoría funcional suficiente para reincorporarse a su puesto de trabajo.

El profesiograma de la empresa: El documento que conecta su dolencia con su trabajo

El profesiograma o certificado de funciones es un documento emitido por su empresa donde se describen detalladamente las tareas y los requerimientos físicos y/o mentales de su puesto de trabajo. Es una prueba crucial que permite al inspector conectar de forma objetiva las limitaciones que indican sus informes con las exigencias de su profesión. Solicítelo siempre por escrito.

La perspectiva del abogado experto: Por qué la estrategia lo es todo

Superar el Tribunal Médico no depende de la suerte, sino de una estrategia jurídica y médica bien definida.

Antes de la cita: La preparación documental y testimonial

Un abogado especialista no le dirá qué mentir, sino cómo organizar la verdad. Revisará toda su documentación médica para detectar puntos débiles, le ayudará a recopilar las pruebas necesarias como el profesiograma y, fundamentalmente, le preparará para que su testimonio durante la visita sea claro, coherente y consistente con la evidencia documental.

Después de la cita: La reclamación previa y la vía judicial

Si el INSS deniega la incapacidad, no es el final del camino. Es el comienzo de la defensa legal formal. Un abogado experto se encargará de redactar una Reclamación Previa sólida contra el Informe de Síntesis desfavorable y, si esta es desestimada, de presentar una demanda judicial para que sea un juez quien valore su caso con todas las garantías legales.

No se enfrente a este complejo proceso en solitario. La diferencia entre una pensión concedida y una denegada reside, en la gran mayoría de casos, en un asesoramiento experto desde el primer momento.

¡CUÉNTANOS TU CASO! Nuestros abogados laboralistas estarán encantados de estudiar la viabilidad de su situación y ofrecerle la mejor estrategia para defender sus derechos. Contacte con nosotros sin compromiso.