Incapacidad permanente por Artritis reumatoide

La artritis reumatoide es causa de incapacidad permanente cuando provoca dolor intenso y limitación en los movimientos de la articulación afectada.

Para que se conceda incapacidad permanente por artritis reumatoidea (o artritis reumatoide) deberemos contar con informes médicos del reumatólogo, en el que indique el nivel de dolor que padecemos y el grado de limitación de las articulaciones afectadas. Hemos de decir que para la valoración de la incapacidad necesitaremos informes médicos (públicos o privados), dado que el Tribunal Médico nos lo pedirá.

Sufrir dolor por artritis reumatoide no es suficiente para obtener incapacidad permanente; tendremos que probar el dolor y la limitación de movimiento con informes médicos en el que se establezcan limitaciones.

Limitaciones que provoca la Artritis Reumatoide

La concesión de incapacidad permanente estará sujeta a que probemos nuestras limitaciones físicas, por lo que será necesario aportar al Tribunal Médico informes clínicos que lo demuestren.

Cuando nos referimos a limitaciones físicas por artritis reumatoide nos referimos al dolor y a la falta de movimiento.

Es muy conveniente que estos informes indiquen limitaciones, no sólo que indiquen la enfermedad que se padece, dado que la incapacidad permanente se concede por las limitaciones para trabajar, y no por el tipo de enfermedad. En este caso se ha de valorar el dolor y la limitacion de movimiento.

Dolor por Artritis reumatoide

El dolor es una de las consecuencias más incapacitantes que existen. El principal problema que nos encontramos es la forma de medirlo, dado que es muy subjetivo.

Habrá personas que soporten un dolor extremo, y otras que no soporten un dolor leve. Para ello existe una escala médica, denominada EVA (Escala Visual Analógica de Dolor), en el que el dolor se gradúa de 0 (sin dolor), a 10 (dolor insoportable). Por ello, es muy conveniente que, en los informes médicos de reumatología, o en los de la unidad del dolor, se indique el nivel de dolor que se padece.

Será determinante para conceder un grado u otro de incapacidad permanente.

Limitación de movimiento por Artritis Reumatoide

La segunda consecuencia o limitación es la falta de movimientos. El dolor que provoca esta enfermedad hace que, no podamos realizar el arco de movimiento completo en la articulación afectada. Si, por ejemplo, padecemos artritis de manos, en muchos casos el propio dolor no nos permitirá cerrar la mano. Pero tampoco podremos hacer fuerza para sostener, agarrar o movilizar un objeto de determinado peso. Por ello habremos de analizar si la artritis reumatoide nos impide llevar a cabo la función de pinza, por ejemplo.

Grados de incapacidad permanente por Artritis Reumatoide

Incapacidad permanente total

La incapacidad permanente total es aquella que no nos permite realizar nuestra profesión habitual (la última realizada previa a la concesión de la incapacidad permanente). Por ello tendremos que valorar qué tipo de tareas realizo en mi profesión y que tareas no puedo realizar por las limitaciones que me provoca la propia enfermedad.

Por ejemplo; si un oficial primera albañil padece artritis reumatoidea con afección grave en las manos, resulta evidente que no podrá desempeñar su profesión. Y ello dado que la profesión de albañil tiene una componente física muy alta.

El albañil debe manipular múltiples objetos de peso, movilizarlos y transportarlos, por lo que si se padece dolor severo y falta de movimientos completos en manos y dedos, se podrá obtener el grado total de incapacidad.

Incapacidad permanente absoluta

Si el dolor que provoca la artritis que padecemos es de tal intensidad que nos impide tareas sencillas y de poco peso o esfuerzo físico se podrá conceder la incapacidad permanente en grado absoluto. Hemos de recordar que le grado absoluto de incapacidad permanente se concede a aquellas personas trabajadoras que no poseen capacidad para desempeñar ningún trabajo en condiciones de rentabilidad, continuidad y eficacia.

Por ello, si el dolor es severo, no responde a los distintos tratamientos prescritos y las limitaciones de movimientos son tan severas que incluso los de menor esfuerzo resultan imposibles de realizar, se concederá el grado absoluto.

Y ello, conllevando una pensión del 100% de nuestra base reguladora y exenta de tributar por IRPF.

Sentencias incapacidad permanente por Artritis Reumatoide

Ponemos a tu disposición una selección de nuestras sentencias de incapacidad permanente por artritis reumatoide más relevantes, en las que podrás analizar las resoluciones conseguidas por nuestro despacho, los criterios legales de valoración y el tipo de grado de incapacidad concedido en cada caso.