Incapacidad permanente por insuficiencia renal crónica

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Incapacidad permanente por insuficiencia renal crónica

La Insuficiencia Renal Crónica, provoca en la mayoría de ocasiones incapacidad permanente.

Depende del grado de insuficiencia que padezcamos, se concederá un grado total o absoluto. Y en los casos más graves, se concederá gran invalidez por insuficiencia renal crónica

¿Qué grados existen de Insuficiencia Renal Crónica?

Dependiendo del nivel de filtración globomelurar, la insuficiencia renal crónica se clasifica en 5 etapas. Dependiendo de la etapa en la que se encuentre la persona trabajadora, se concederá un grado u otro de incapacidad permanente por insuficiencia renal crónica.

Etapa 1

La capacidad de filtración permanece en niveles cercanos a la normalidad,  iguales o mayores a 90 ml/minuto. En caso de existir daño o limitaciones, son leves.

Etapa 2

Cuando la enfermedad se agudiza y la tasa de filtración se encuentra entre 60 y 89 ml/minuto, se considera etapa 2. En este caso, las limitaciones pueden ser algo mayores.

Etapa 3-A

Nos encontraremos en esta etapa cuando tengamos una tasa de filtración glomerular de 45 a 59 ml/min. En esta etapa se producen limitaciones físicas relativamente poco intensas.

Etapa 3B

La etapa 3B es aquella que se produce cuando el nivel de filtración globomerular es de 30 a 44 mililitros/minuto. Los síntomas severos y agudos comienzan a agravarse.

Etapa 4

En esta etapa, la capacidad de filtración de los riñones se reduce mucho. Es de entre 15 a 29 m/minuto, por lo que ya en esta etapa, en ocasiones se inicia el tratamiento con diálisis.

Etapa 5

Si la capacidad de filtración es de menos de 5 ml/minuto, se considera etapa 5 y por tanto insuficiencia renal.

¿Qué limitaciones provoca la Insuficiencia Renal Crónica?

Dependiendo de la fase en la que se encuentre el trabajador, puede padecer limitaciones como: Fatiga y debilidad, insomnio, pérdida de apetito y pérdida de peso involuntaria, náuseas y vómito, hinchazón en las piernas, los pies y los tobillos, picazón en la piel y sequedad, cambios en la frecuencia y cantidad de orina, dolor o presión en el pecho, hipertensión arterial, anemia, cambios en el estado mental, como confusión, problemas de concentración y modificaciones de personalidad (trastornos de personalidad).

Grados de incapacidad permanente por insuficiencia Renal Crónica

Incapacidad permanente total

Si el trabajador se encuentra en la fase 3 o 4, suele concederse la incapacidad permanente total. No obstante, dado que el criterio para conceder la incapacidad son las limitaciones para trabajar, cada trabajador sufrirá limitaciones diferentes.

Se tendrá que valorar en cada caso concreto no sólo la etapa de insuficiencia renal crónica en que se encuentre, sino las dificultades para desarrollar su trabajo.

La incapacidad permanente total por insuficiencia renal crónica conlleva una pensión del 55% de la base reguladora (si es menor de 55 años), y del 75% si tiene 55 o más años (siempre que no realice otra profesión compatible)

Incapacidad Permanente absoluta

En las fases más severas de la enfermedad se concederá incapacidad permanente absoluta. Normalmente se concede en las fases 4 y 5, en las que la capacidad renal de filtración es muy baja y aparecen síntomas como hinchazón y dolor de piernas, pies y tobillos, hipertensión arterial, anemia, pérdida de capacidad cognitiva, etc. Depende pues de la insuficiencia renal síntomas para conceder o no el grado absoluto.

Pero además, el propio tratamiento de diálisis hace imposible el desarrollo del trabajo de forma continua, rentable y eficaz, requisitos jurisprudenciales para poder realizar legalmente cualquier trabajo.

Gran invalidez

Es poco frecuente obtener gran invalidez por insuficiencia renal crónica, reservada para aquellos casos en los que además de no tener capacidad para trabajar, se necesita una persona para que el trabajador enfermo realice las actividades básicas de la vida diaria.

¿Se puede trabajar con insuficiencia renal crónica?

Dependerá de las limitaciones que encada persona provoque. Es frecuente que a partir del estadio 3ª comiencen limitaciones severas, por lo que ya en ese momento será difícil poder trabajar. Además, influirá la insuficiencia renal tratamiento para ser conscientes de las limitaciones que padece la persona trabajadora.

Además, desde el punto de vista legal, en caso de que nos concedan una incapacidad permanente podremos trabajar siempre que nuestro grado de incapacidad permanente por insuficiencia renal crónica nos lo permita.

Si hemos obtenido incapacidad permanente total, podremos legalmente trabajar en cualquier profesión diferente a la  habitual.

En caso de que se nos conceda incapacidad permanente absoluta o gran invalidez, no podremos desarrollar legalmente ninguna profesión.

Diálisis y trasplante renal

Diálisis

Si la persona trabajadora se ha de someter a diálisis, pierde la capacidad de trabajar de forma continua y rentable.

Resulta lógico pensar que, si el trabajador enfermo ha de mantener sesiones continuas de diálisis, no pueda acudir a trabajar de forma regular. Pero además, habitualmente la diálisis se prescribe en fase muy avanzadas de la enfermedad, en las que la capacidad filtrante del riñón se encuentra muy reducida y aparecen otro tipo de limitaciones provocadas por la enfermedad.

De esta forma, la mayoría de los trabajadores diagnosticados en fase 4 o 5 por Insuficiencia Renal Crónica en proceso de diálisis pueden conseguir incapacidad permanente absoluta, siempre que los informes médicos de Nefrología acrediten la situación real y las limitaciones que padece.

Trasplante renal e incapacidad permanente

Cuando se produce un trasplante renal, provenga de donante vivo o fallecido, el trabajador que recibe el riñón ha de medicarse de por vida para evitar el rechazo del órgano trasplantado. En muchas ocasiones, pese haberse producido el trasplante, no se obtiene una función renal completa, unido a ciertos efectos secundarios que la medicación prescrita puede ocasionar.

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Sentencias de Incapacidad Permanente por Insuficiencia Renal Crónica

Incapacidad Total por Insuficiencia Renal Crónica (IRC)

Incapacidad Absoluta por Insuficiencia Renal Crónica (IRC) y trasplante de riñón

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